martes, 1 de marzo de 2011



SECUENCIALMENTE



**

Sentir unas ganas tremendas de escribir, pero no saber sobre qué, ese reboso de energía con el que no escribirías sino descripciones abstractas de estados, de paisajes imaginarios, logorreas y retoricismos conformando un gran fractal verbal sin objetivo, puro esteticismo.

**

Actividad onírica, actividad atómica: abstracciones aparentes, pululantes de elementos reales e ignotos.

**
Me ocurre con algunos artistas que me resulta imposible identificarlos con la nacionalidad a la que pertenecen. Por ejemplo, al músico Edgar Varése no puedo conceptuarlo como francés, ni siquiera asociarlo a lo estéticamente francés, como sí me ocurre sin problemas con un Debussy o con un Ravel. Varése es un remolino, una energía sonora. Trasciende la mera clasificación de ser sólo un compositor francés. Resulta significativo que se nacionalizara norteamericano, es decir, ciudadano de cualquier sitio del planeta o del futuro. Algo parecido me ocurre con la cupletista española Raquel Meller, aunque por otros motivos. Por alguna razón, no logro hacerme a la idea de que fue una cantante española. Su finura, su fragilidad, su belleza misteriosa añadida a lo estereotipado de su aspecto, hacen que se me antoje una actriz hollywoodense de la época disfrazada de española. He visto una breve filmación suya en la que se la ve bailando y por lo desmañado que lo hace, mas bien parece una artista extranjera intentando imitar los exóticos movimientos de una bailaora. Es como si por algún motivo extraño no lograra encarnar plenamente el folklore que pretendía representar.
**
Mi beso te envasa al vacío: la pequeña eternidad en la que durarás para siempre mimada por mí.
**
.

No hay comentarios:

CRECIENDO ENTRE IMPRESIONISTAS DIARIOS DE Julie Manet

Hay momentos en la historia de la cultura, episodios estilísticos o simplemente períodos en el ámbito de un siglo, que se revisten de un e...