Tras un episodio confuso que acabo de olvidar, me encuentro hablando con Borges. Le doy un libro que no es suyo- aprovecho su ceguera – para que me lo firme. Borges, creyendo, naturalmente que es una obra suya, me confiesa algo sobre cómo la escribió y me cuenta chascarrillos sobre su contenido, empleando alguna que otra palabra gruesa.
miércoles, 12 de junio de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
YO ERA UN FOTÓGRAFO FAMOSO Y UN DÍA....
A veces, el poder de evocación de una fotografía resulta más específico que el de la pintura. Esta imagen de Lucien Clergue , tomada en Esta...
-
IDENTIDADES NÓMADAS: LOS DIARIOS DE ISABELLE EBERHARDT Borges nos hablaba en uno de sus cuentos de aquella inglesa que, capturada por unos ...
-
Llevo años pensando en ese país tan extraño, como decía Borges , que es Estados Unidos . Pensando en su cine ante la especificidad europea...
-
Si hace décadas se cantaba aquello de malos tiempos para la lírica, no digamos ya para la épica, a no ser que algún súbito acontecimiento ...

No hay comentarios:
Publicar un comentario