lunes, 24 de febrero de 2020

EN LA RED (INTERNET)




Dos robots besándose;
un amanecer súbito y prodigioso en el Caribe;
Bela Lugosi apareciéndose entre la niebla;
una mujer que se arremanga la falda,
un almacén que se viene abajo a cámara lenta;
el poder de los sueños, Papa Noel arrestado,
una vieja fachada llena de grafitis;
un esplendoroso alumbrado público en un paisaje nevado,
una tira de cómic,
tres chimpancés sentados a la mesa, dispuestos a desayunar;
una calavera que te guiña un ojo,
un reloj cuyas agujas van a toda pastilla,
dos boxeadores bailando, alguien que resucita;
el mal de ojo explicado a los niños,
una taquería anunciándose como el chupacabras;
una filmación antigua de una mujer
haciendo el gesto de alguien a quien le falta un tornillo;
una mariposa fosforescente girando sobre sí misma,
un personaje emitiendo rayos mágicos por los ojos;
un plató de televisión misteriosamente vacío,
una stripper danzando enloquecidamente,
la caída de la tarde en una avenida solitaria;
unos alemanes brindando con jarras de cerveza gigantescas,
personas en medio del desierto,
posando con un dinosaurio de cartón piedra detrás;
unos carteles destrozados y viejos;
varias personas en éxtasis en torno a una mesa de disección,
el hombre lobo en la barbería;
un perfil alucinante de Franz Lizst que  sonríe jactándose de su aspecto;
haz algo antes de que se acabe el tiempo, escrito en una pared,
hombres que desfilan disfrazados de margaritas gigantes;
una pelota que bota interminablemente,
unos guantes que tocan un concierto para piano,
escenas de películas japonesas de ciencia ficción,
miríadas de pétalos de rosa;
una hilera de espantapájaros saludando;
unos cuencos derramados, un cuerpo que sale de otro,
inscripciones misteriosas;
ceremonia de entrega de premios en una imagen de 1950,
el extrarradio de New York;
Lenin estornudando, mi prima presa de un ataque de risa;
una mujer tomando el sol en una terraza;
un conjunto de reflejos sumiéndose en una masa viscosa,
manifestaciones populosas, una Biblia que se abre sola;
unos ojos rasgados mirándonos;
cometas atravesando el cielo del pasado
que quizá pueda ser, también, el del futuro;
playas solitarias, montones de libros;
márgenes fosforescentes simulando rostros,
un buda que flota sobre un océano de césped quemado,
alguien solitario que pasea bajo la lluvia;
una habitación desaseada en una vieja polaroid;
arroyuelos de un pueblo húngaro
sobre los que saltan los enamorados;
la corona del rey de Burgundia,
juegos de canicas, lapiceros, gomas, mesas
llenas de objetos de papelería, un protordenador de los setenta;
unas cortinas en llamas:
el naufragio de un barco, alguien que se quita una máscara,
un cordero con siete patas, otro con un solo ojo;
transparencias que sugieren el cuerpo enamorado;
Narciso que se contempla fascinado en un estanque;
una exposición de mandíbulas de tiburón;
una copa metálica de la que sale una llama;
un predicador loco llamando a la cordura;
la belleza y la falacia del pasado;
fusilamientos en masa,
sexo en masa,
ataque de risa en masa;
un polígono de infinitos lados;
la antimateria en una caja de galletas;
siluetas sobre una pared;
un hombre con un gesto pícaro en un daguerrotipo,
una prostituta árabe con el rostro pintado de verde,
secuencias vertiginosas de la muerte y resurrección de una estrella;
la noche de los tiempos explosionando en la palma de mi mano;
el dibujo infantil de un suicidio;
una imagen melancólica de finales de siglo
del barrio bohemio de Montmartre;
un vientre convertido, fotográficamente,
en un desierto de sensuales dunas,
el antifaz de Fantomas;
los bisontes de Altamira trotando sobre el infinito;
una mujer semidesnuda apoyada sobre una tumba,
hojas de otoño cubriendo la superficie de un estanque;
haces de luz atravesando la niebla;
un don Quijote cinematográfico
luchando contra odres de vino a cámara rápida;
Blancanieves leyendo a Borges,
Platón dando un discurso desde la pantalla de un ordenador;
Ramón Gómez de la Serna
leyendo una conferencia desde un trapecio;
una puerta de papel que se desliza
dando entrada a un hombre enmascarado;
una caja de la que sale una mano chasqueando los dedos;
dos enamorados que se despiden en un film antiguo;
una monja en bicicleta,
una bola de cristal en la que se refleja un atardecer frente a un lago,
una lluvia cayendo dentro de una habitación;
la imagen de cientos de miles de circuitos
como el entramado de un texto confuso e interminable;
una banda musical tocando en el Polo Norte,
alguien que duerme y se ven sus sueños como las tiras de un cómic;
un dosel que se desliza, torbellinos de agua girando;
Dalí, que para firmar un cuadro, toma carrerilla;
manuscritos tirados por una escalera, una gotera que no para de gotear;
una ventana oval que da al infinito, una manivela que gira sola,
la proporción áurea, el libro de los pasajes de Benjamin,
un desfile de locos por el jardín del manicomio, auroras boreales;
batallas fantásticas, el mar en la noche,
tu madre vigilando tu sueño;
las hojas de los arboles cayendo ruidosamente;
tú reclamando un puesto en el cosmos;
tu casa que parece otra si entornas los ojos;
la vigilia del tiempo,
un rascacielos que se refleja en un charco,
el sol cayendo lentamente por una pendiente incendiada,
Carlitos y Snoopy, yéndose de la ciudad;
noches de diamante,
la sucesión de los siglos,
un pájaro que pasa…...



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